lunes, 3 de septiembre de 2012

"Las Ranitas en la Nata"


Había una vez dos ranas que cayeron en un recipiente de nata.
Inmediatamente se dieron cuenta que se hundían: era imposible nadar o flotar demasiado tiempo en masa espesa como arenas movedizas. Al principio, las dos ranas patalearon en la nata para llegar al borde del recipiente. Pero era inútil, sólo conseguían chapotear en el mismo lugar y hundirse. Sentían que cada vez era más difícil salir a la superficie y respirar . Una de ellas dijo en voz alta : " No puedo más. Es imposible salir de aquí. En esta materia no se puede nadar. Ya que voy a morir, no veo porque prolongar este sufrimiento. No entiendo que sentido tiene morir agotada por un esfuerzo estéril."
Dicho esto, dejó de patalear y se hundió con rapidez, siendo literalmente tragada por el espeso líquido blanco. La otra rana más persistente, o quizá más tozuda se dijo : "No hay manera! Nada se puede hacer para avanzar en esta cosa. Sin embargo aunque se acerque la muerte, prefiero luchar hasta mi último aliento. Ni un solo segundo antes me llegará la hora". 
Siguió pataleando y chapoteando siempre en el mismo lugar, sin avanzar ni un solo centímetro, durante horas y horas. Y, de pronto, de tanto patalear, la nata se convirtió en mantequilla. Sorprendida, la rana dio un salto  y, patinando llegó hasta el borde del recipiente. Desde allí, pudo volver a casa croando alegremente.

MORALEJA: En este cuento se puede distinguir las diferentes formas en que se hablaban para sí las dos ranitas, y como eso determinó el resultado final de una y otra... Y a propósito... ¿Cómo sueles comunicarte contigo frente a la adversidad?.

Prof. Norma Hilda Corrales
Diplomada en PNL & Coaching Ontológico

PNLCBA CONSULTORA